Temprano en la mañana salimos rumbo a Stonehenge, Stonehenge es un crómlech, es decir, un círculo de grandes piedras megalíticas, que en este caso tienen además dinteles y no forman un solo círculo, sino tres, concéntricos y rodeados por un talud y un foso. La posición de esas piedras es tal que se le considera también una especie de observatorio astronómico predictivo (señala el punto de salida del sol en el solsticio de verano, el punto en el que se oculta en el solsticio de invierno, etc.).Hay todo tipo de teorías, pero las investigaciones muestran que las personas que lo construyeron, en el 2.000 a.C.) movieron las piedras haciéndolas rodar sobre troncos, que las tallaron de forma machihembrada para que encajaran unas con otras y que se creó un poblado durante muchos meses para alojar a los obreros que levantaron Stonehenge.
Visitamos la Catedral de Salisbury, catedral de aspecto imponente en su emplazamiento aislado de edificios, situado en vastos espacios verdes, a las afueras de un palacio y residencia real, notable por su antigua relación con la familia real británica y porque encarna casi un milenio la ciudad. Continuamos hacia Windsor para visitar el castillo El castillo de Windsor es de historia arquitectónica, es un palacio y residencia real, notable por su relación con la familia real británica y porque encarna casi
un milenio de historia arquitectónica.
Seguimos rumbo a Londres, arribo y alojamiento.